En el CETA se llevan a cabo varios proyectos enfocados a aumentar la eficiencia energética en diversos casos y entornos. Ejemplos de aplicación directa en el aumento de la eficiencia energética incluyen la modificación de las instalaciones en el Centro de Proceso de Datos, de forma que se divide el espacio físico en zonas frías y calientes. Mediante esta sencilla práctica de climatización se consigue reducir el gasto en energía de los equipos de refrigeración.

En la misma línea, sencillas modificaciones que se pueden realizar en cualquier vivienda pueden redundar en el ahorro en el consumo energético de la misma. Algunas recomendaciones, como modificar el acristalado en ventanas o el cambio en el sistema de calentamiento pueden dar lugar a ahorros mucho mayores de lo que el usuario podría esperar. En el CETA se ha diseñado (y se almacena) un sistema Web que realiza estos cálculos.

Volviendo la atención al CPD, esta vez dentro de lo que ocurre dentro de los sistemas de cómputo, a menudo puede comprobarse que varios de los servidores están encendidos pero su carga de trabajo es baja o nula. En el centro se trabaja en proyectos que agrupan la carga computacional de ciertos servidores y la reúnen en una única unidad de cómputo. De esta forma es posible apagar los sistemas que han quedado libres y por tanto se dejará de consumir la energía eléctrica que requerían.

Proyectos